LAS INCÓMODAS PATALETAS!!

Es muy probable que en algún momento hayas presenciado a un niño o niña haciendo una pataleta o berrinche. Tal vez ese pequeño sea tu hijo o quizás ese alumno  que  tienes en tu aula de clases y no has sabido cómo controlar la situación. En este caso es muy importante que conozcas qué es una pataleta o berrinche y qué hacer en estas sufridas situaciones.

QUÉ ES LA PATALETA O BERRINCHE

Es la manera que tiene el niño de protestar cuando algo le incomoda o cuando sus deseos no son satisfechos. En el caso de los niños de 0 a 6 años se puede presentar para llamar la atención o hacer sentir su presencia. 

Generalmente se presentan con llanto, gritos, y se tiran al piso o zapatean. En la mayoría de los casos las pataletas inician entre los 2 y 3 años de edad, pues es el tiempo en que ellos quieren tener el control  y tomar decisiones pero  como no saben expresar sus sentimientos verbalmente, se sienten frustrados y he ahí la sufrida pataleta.

Aunque las pataletas no son nada agradables, es importante tener presente que los niños no lo hacen con el fin de molestarte.

QUÉ HACER ANTE UNA PATALETA

Aunque parezca o sea complicado, es fundamental que los padres o cuidadores del niño mantengan la calma sin tener que ceder a sus deseos, ni regañarlo, ridiculizarlo, gritarlo, castigarlo o agredirlo. Si reaccionamos con rabia no lograremos cambios favorables.

Las extensas explicaciones sobre las reglas solo servirá para confundir al pequeño, es importante explicárselas brevemente a medida que vaya creciendo. Jamás amenace al niño con abandonarlo, solo espere a que la pataleta se le pase y si se encuentra en la calle acompáñelo sin prisa y respeto o si está en la casa  déjelo en un lugar tranquilo.

Recuerde siempre que un ambiente tranquilo ayuda a recuperar el control. Un abrazo puede servir de mucho y cuando el niño se calme no le recrimine su comportamiento, solo dialogue con el pequeño y superen el episodio.

De esta manera el niño entenderá que para tender lo que desea no es necesario gritar y hacer berrinches y que de esta manera su cuidador o padre no cederá. Comprenderá que debe dialogar y que de esta manera será escuchado y atendido.

No es posible evitar todas las pataletas, ya que es la forma en que el niño manifiesta sus emociones pero también es la forma en que aprende a manejarlas.